Son muchas las razones por las que vale la pena monitorear tus ciclos. Quizás al principio te suene raro, te dé pereza o te confunda, pero si una parte de ti está intrigada por lo que acabamos de decir, sigue leyendo, tenemos mucho que contarte.
Monitorear tus ciclos y entender cómo funciona tu cuerpo es un proceso hacia conocerte a ti misma. Piénsalo así, cada mes, más o menos, tu cuerpo cumple un ciclo en el que tus hormonas han subido, bajado y vuelto a subir. Cada 28 días tu cuerpo repite un mismo proceso y no prestarle atención, cuestionarte o tratar de identificar patrones, es perder oportunidades de reconocerte.
Todos tenemos una idea general de lo que pasa en nuestros cuerpos durante el ciclo y por supuesto de los síntomas que experimentamos. Pero cada uno es un universo y aunque anatómicamente seamos iguales, cada ciclo, cada organismo y cada persona menstruante tiene su manera de vivir y de habitarlos.
Entender tus ciclos puede darte la capacidad de identificar tus antojos, de conocer qué día tienes los peores cólicos o cuando es más fácil que te den dolores de cabeza. Llevar un seguimiento de tu ciclo puede avisar con tiempo que vienen días donde tu piel va a devolverse a la adolescencia o donde tu pelo va necesitar que lo mimes. Saber en qué momento de tu ciclo estás te ayuda a entender cuándo eres más o menos fértil, y puede empezar a mostrarte qué días es común que sientas más o menos deseo sexual. Conocernos es importante para habitarnos mejor, para vivir en armonía con nuestro cuerpo, para ser más conscientes. Conocernos es jugar a nuestro favor, es empezar a prestarnos atención, es romper tabús que tenemos hasta con nosotrxs mismxs.
Conocerte mejor está a un pequeño paso: empezar a monitorear tu ciclo.
Aquí te dejamos algunas ideas para hacerlo:
Apps : Clue, Flo, Health (iPhone)
Manual ¡Hazlo tu mismx! : Coge una libreta que te guste y empieza a apuntar algunas de las siguientes cosas:
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Fechas de tu menstruación.
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Color, cantidad, textura de tu periodo.
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¿Cómo te sientes? Durante todo tu ciclo monitorea los eventos que vayas sintiendo: dolor de cabeza, cólicos, sensibilidad o molestias, hinchazón, estado emocional, energía...
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Ponle una nota a tu día del 1 al 10.
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Anota los medicamentos que estés tomando.
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Si hay algo en particular que quieres empezar a analizar, anótalo aquí: tu pelo, tu piel, tu deseo sexual, tus cambios de humor...